Traducido por Jovan Perea
El presente texto es una secuela independiente del artículo La longitud de los cinturones altomedievales y registra mi camino hacia una reproducción ideal de un cinturón altomedieval incluyendo vueltas y errores. A modo general, puede servir como recomendación para otros que quieran comprar un cinturón histórico.
15 años, 8 cinturones
El cinturón es una de las partes más básicas de la vestimenta de un recreador, la cual se compra junto con la primera túnica, trousers, zapatos y cuchillo. Significativamente, los recreadores tienden a comprar los cinturones más disponibles, sin una apropiada investigación de ofertas o fuentes. Del mismo modo, yo compre un gran número de cinturones durante mi “carrera” altomedieval. Si recuerdo correctamente, no fueron menos de 8 (o 10 si cuento los cinturones de espada). Después de un largo periodo de 15 años, creo que finalmente conseguí cinturones auténticos, funcionales y estéticamente interesantes con los que estaré satisfecho por un largo periodo de tiempo. Para el propósito de este artículo, encontré cuando y a que precios compre mis cinturones:
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1er cinturón de 2006 – 18 EUR
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2do cinturón de 2009 – 23 EUR
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3er cinturón de 2011 – 23 EUR
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4to cinturón de 2013 – 27 EUR
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5to cinturón de 2017 – 135 EUR
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6to cinturón de 2019 – 23 EUR
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7mo – 8vo cinturones de 2021- 2 × 77 EUR
¿Que nos sugieren estos datos? Sobre el curso de 14 años (2006-2020), compre 6 cinturones con un valor total de más de 250 EUR, los cuales sirvieron un promedio de 2-4 años. En la mayoría de los casos, la razón de su exclusión fue una hebilla rota, hecha de un metal suave y no histórico, pero también mi propio aumento de demanda. De los cinturones que compre durante este periodo, es típico que me fije en el bajo precio y componentes decorativos de metal, mientras ignoraba el material de las partes metálicas y la apariencia del cuero, lo cual resultaba en estar satisfecho con cinturones muy largos de cuero grueso y con una hebilla suave. Una vez me di cuenta cuánto dinero había gastado en equipamiento no histórico, me di cuenta que era más costo-efectivo invertir en un cinturón que sería más caro, pero cada una de sus partes duraría más. Me di cuenta que en todos los apartados es mejor para mi tener un cinturón hecho a medida, que no puede ser criticado desde un punto de vista histórico, duran de cinco a diez años y es más funcional que tolerar los históricamente no adecuados, cinturones ya hechos con un periodo de vida significativamente más corto. Una importante condición es que planeo usar el objeto repetidamente a largo plazo.
Si eres un recreador novato que está planeando participar en actividades históricas por más de 5 años, puedo recomendarte de todo corazón invertir en un cinturón apropiado, hecho a medida. En adición, tendrá la consecuencia de que le darás el trabajo a un artesano de la comunidad y tu tendrás un cinturón que será inmune a la alza de los estándares (de la comunidad, de tu grupo, y tuyos). De cualquier manera, como en todos los otros casos, el dicho “nunca le creas al vendedor” aplica en el sentido de que la investigación propia viene primero, porque el mercader puede estar equivocado y esta financieramente motivado en no mostrar toda la información.
Izquierda – cinturón en longitud estándar de 150 cm, hecho de cuero con 3 mm de grosor, componentes vaciados en peltre, unido con remaches modernos. Hebillas sin placas; cinturón sin trabilla. Precio 29 EUR. Producción Wulflund.com.
Derecha – cinturón hecho a pedido al tamaño requerido, hecho de cuero doblado y cocido de 1 mm de grosor, componentes de fierro. Hebillas con placas y equipadas con trabillas. Precio 77 EUR por pieza. Producción Roman Král.
Longitud del cinturón
Si estas en el viaje de diseñar tu propio cinturón, el primer punto con el que serás confrontado como cliente es la longitud del cinturón. Este tema fue discutido minuciosamente en el artículo La longitud de los cinturones altomedievales, pero aquí me gustaría advertirte más allá de la mira de este artículo sobre algunas de las dificultades que descubrí por errores propios. Ya que nunca he sido dueño de un cinturón largo compuesto, este aviso solo aplicara a los cinturones de punta corta.
Por el artículo de arriba, es obvio que los cinturones no deben ser más de 20 cm más largos comparado a la circunferencia de tu cintura actual. Incluso de manera frecuente parece ser que los cinturones altomedievales no exceden la vuelta más de 10 cm – en otras palabras, los cinturones están realmente personalizados. Esto puede generar conflicto con nuestra recreación si:
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Quieres tener un cinturón para ambos trajes civil y de combate. Si tu traje de combate consiste en acolchado grueso, la diferencia de circunferencia puede superar los 10 cm. Si no estás dispuesto a reducir el acolchado, entonces será apropiado comprar dos cinturones de diferentes longitudes. Personalmente, soy un usuario de malla con una capa de lana debajo de ella, así que la diferencia solo son unidades de centímetros. En el pasado, cuando tenía un acolchado grueso, por supuesto usaba un extremadamente largo, universal cinturón para ambos propósitos, lo cual no es el más feliz de los escenarios.
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Si cambias drásticamente la circunferencia de tu cintura por ganar o perder peso. En este caso hay un riesgo de que tus cinturones actuales no te queden y necesites comprar nuevos. Mi última orden de cinturones estuvo motivada por perder aproximadamente 15 kilos, lo que resulto en al menos una pérdida de 12 cm de cintura. Todos los cinturones que tenía hasta entonces se volvieron inusables.
Vale la pena mencionar que algunas piezas históricas, como los cinturones modernos, estuvieron equipadas con trabillas de metal o cuero en las que la punta del cinturón podía ser insertada. Desde la posición de una persona que ha procesado órdenes y quejas en una tienda histórica por varios años, me gustaría atraer la atención sobre varios problemas en los cuales uno puede cometer errores:
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¿Cómo encontrar la cintura? La cintura no está necesariamente colocada a la altura del ombligo. Nosotros medimos la cintura en el punto más delgado del abdomen, aproximadamente a medio camino entre la orilla más alta del hueso de la cadera y la costilla mas baja.
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¿Cómo medir la cintura? De pie, sin ropa, con las manos abajo, con exhalación tranquila, con la cinta ajustando cómodamente pero sin apretar.
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¿Cómo mandar las medidas al artesano? Idealmente, decimos que el largo de la cintura (posiciona el primer agujero) y el largo deseado del cinturón. En el pasado, presenciamos de situaciones poco placenteras donde estos dos valores se invirtieron.
Si algo debes recordar de este capítulo, entonces esto seguramente es que un cinturón que alcanza los muslos o rodillas del dueño no es señal de un buen cinturón, lo cual digo como alguien que hasta hace poco presumía un cinturón largo como signo de lujo y de prestigio en la comunidad.
Construcción del cinturón
En la recreación altomedieval actual, un cinturón de una sola capa simplemente cortada de cuero de 2-3 centímetros de ancho es una representación extremadamente fuerte, al grado que en la comunidad checoslovaca, contando entre 500-700 recreadores activos, solo algunas unidades de casos no corresponderán a esta descripción. Ya que nunca ha habido una apropiada discusión en la comunidad, la vasta mayoría de recreadores no tiene idea de que hay alternativas. ¡Yo no supe de ellas en un largo tiempo! Ahora resumamos a grandes rasgos la construcción de los cinturones europeos del periodo de los siglos IX al XII:
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Textil (una capa)
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Corteza de abedul (una capa)
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Hongos poliporoides (una capa)
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Cuero
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Una capa
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Dos capas
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Una pieza, doblada
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Dos piezas, cocidas
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Tres capas
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Cuero envolviendo cuero doblado
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Combinando diferentes materiales
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Cuero envuelto en seda
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Corteza de abedul envuelta en cuero
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Corteza de abedul envuelta en seda
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Podríamos sorprendernos de la presencia de cinturones compuestos. Esta construcción relativamente laboriosa, la cual en el caso de un cinturón de una pieza doblada , incluye alrededor de mil agujeros por metro, ha sido usada no solo en el caso de cinturones largos con varios componentes, pero también en el caso de no decorados, cinturones utilitarios. El uso de múltiples capas no solo buscas una vida útil más larga, si no también la combinación de diferentes materiales de diferente fortaleza, resiliencia, memoria, y cualidades estéticas. Personalmente, pienso que si quieres tener un cinturón con numerosos componentes metálicos, no puedes evadir un cinturón compuesto, y deberías considerar los cinturones de construcción compuesta incluso en el caso de cinturones simples y menos decorados. Este capítulo puede resumirse en el consejo de que a los materiales del cinturón se les debe dar al menos el mismo cuidado que a las partes metálicas.
Cinturones doblados multicapa sin componentes.
Arriba a la izquierda: cinturón del Norwich Castle Museum. Fuente: Tom Betts.
Arriba a la derecha: fragmentos de arnés del barco funerario de Haithabu. Fuente: Müller-Wille 1976: Abb. 42.
Abajo: lomo de una reproducción. Producción Roman Král.
Cinturón doblado multicapa con componentes.
Arriba: Cinturón de la región del Volga, colección privada. Fuente: Jes Lund-Jacobsen.
Abajo: reproducción de un cinturón compuesto con componentes. Produccion Ferenc Tavasz.
Hebillas, puntas de correa y otros componentes de metal
Si eres honesto sobre la reconstrucción altomedieval y a últimas quieres ahorrar dinero, escogerás hebillas y puntas de correa hechas de los siguientes materiales:
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Martillado
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Hierro
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Hierro con incrustación de plata o aleación de cobre
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Aleación de cobre
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Vaciado
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Aleación de plomo
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Aleación de cobre
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Aleación de cobre recubierta
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Plata
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Oro
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Tallado
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Hueso / asta / marfil / marfil de morsa
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Alternativamente, puedes elegir una versión sin hebilla del cinturón. No hay otras opciones para ti. En particular, deberías evitar aleaciones de estaño o zinc con varias patinas, las cuales reconocerás fácilmente debido a su bajo precio (2-10 euros) y normalmente baja calidad de vaciado. Los componentes en los que tendrás interés como recreador comienzan al precio de 6 EUR (hebillas de bronce) o 10 EUR (hebillas de hierro) por pieza y pueden llegar hasta los cientos de EUR –dependiendo si eliges un modelo vaciado en serie o una producción personalizada. Aunque entiendo que es fácil ir a una tienda electronica, elegir algunos componentes que te gusten, pagar y despreocuparse, todos sabemos subconscientemente que no es la manera correcta de hacerlo. Si puedo sugerir alternativas, puedes intentar con Vasily “Gudred” Majskiy, en la región checa puedes intentar contactar con Storrvara, Kedar Foundry o Skallagrim – Jewelry and Forge. Si la comunicación con los artesanos es inviable para ti y prefieres una tienda electrónica, siempre es mejor elegir, por ejemplo, Armour And Castings or True History Shop que vendedores locales que no ofrecen vienes de la misma calidad y precio. Comprar en el extranjero puede tener la ventaja de ayudarte a diferenciarte de otros en la escena local –en mi carrera he visto un máximo de dos docenas de modelos de hebillas en la comunidad checa, aunque hay cientos de piezas originales.
Dos versions de la misma hebilla, ambas etiquetadas como reprducciones del hallazgo Bj 750 en Birka. Fuente: Václav Maňha.
En este punto, me gustaría señalar tres problemas recurrentes en los cinturones. El primero es que las hebillas definitivamente no condicionan el uso de una punta de correa. Muy seguido los recreadores anhelan comprar sets de hebillas y puntas de correa, pero en la realidad del alta edad media era que no todos los cinturones tenían una punta de correa. Creo que una de las razones por las que pedimos las puntas de correa es por qué hacemos trampa obteniendo todas las partes del cinturón, de modo que son asequibles y pueden ser costeadas por todos –por ejemplo, muchos de los componentes metálicos de aleación de cobre han sido recubiertos y el cinturón en si esta hecho de una manera más compleja, como se indica arriba.
El segundo común problemas el uso de accesorios que provienen de bridas para caballo. Puede ser algo difícil para alguien sin conocimiento en el área distinguir entre ellos, los trabajos de Muraševa (2000) y Hedenstierna-Jonson – Holmquist Olausson (2006) pueden ayudarte. Si no quieres invertir tu tiempo en el estudio de accesorios y no quieres consultarlos, recomiendo evitarlos completamente.
El tercer problema es más complejo en natura y es posible que algunos recreadores veteranos protesten en su contra. Soy de la opinión de que usar hebillas sin placas de sujeción es por decirlo lo menos en el caso de cinturones personales, perneras y espuelas (ie no necesariamente para cinturones usados en arneses para caballos) un descuidado mal hábito. Por su puesto, hay cierto número de hebillas preservadas sin placas, aun así creo que en estos casos simplemente se corroyeron o se cayeron durante la remoción o preservación. En mi opinión las placas extraviadas no justifican cocer la hebilla dentro del cuero, como comúnmente se hace hoy en día. Yo mismo tengo hebillas de viejos cinturones cocidas de este modo –este hecho me molesta y estoy considerando su remplazo general.
Ejemplos de hebillas cocidas en el cuero. Archivo propio.
Cuando miramos en cualquier región de Europa en el periodo de los siglos IX-XI, las hebillas bien preservadas están equipadas con placas, lo cual en el caso de algunas piezas del este de Europa son partes integradas en el vaciado. Veo ventaja en el uso de placas en la posibilidad de una mayor decoración del cinturón y en una sujeción más fuerte, la cual no bloquea el espacio interno de la hebilla el cual seguido es bastante pequeño.
Hebillas de Birka. Fuente: Arbman 1940: Taf. 86.
Hebillas de Haithabu. Fuente: Schietzel 2014: 197.
Hebillas de Gotland. Fuente: Thunmark-Nylén 1998: Abb. 124-5.
Hebillas de la Inglaterra anglosajona. Fuente: Paterson et al. 2014: Fig. 117-8.
Hebillas de la Gran Moravia. Fuente: Hrubý 1955: Obr. 34.
Hebillas de pernera de la Gran Moravia. Fuente: Ungerman 2019: Abb. 7.
Hebillas de la estepa de los siglos VIII-IX. Fuente: Pletněva 1981: Рис. 60-1.
Cinturones Rus de las tumbas C-160 y C-191 de Gnězdovo. Fuente: Muraševa 2006: Abb. 11, 13.
Cinturones letones. Fuente: Muraševa 2006: Abb. 13.
En cualquier caso, recuerda que incluso si tienes un cinturón que no es el más apropiado, nunca es tarde para comenzar a cambiarlo. ¡Me tomo 15 años darme cuenta! Además, muchos cinturones pueden salvarse, por ejemplo, cortándolos o añadiendo las placas de sujeción.
Si leíste hasta aquí, gracias por tu tiempo y espero tus comentarios. Si estás perdido con las fuentes o los contactos, escríbeme y con gusto te ayudare a encontrar los cinturones más baratos, más auténticos y visualmente más llamativos, y también ayudarte a ordenar bienes de afuera. Puedes creerme que hacer equipo histórico personalizado nunca ha sido tan fácil.
Bibliografía
Arbman, Holger (1940). Birka I. Die Gräber. Tafeln, Stockholm.
Hedenstierna-Jonson, Charlotte – Holmquist Olausson, Lena (2006). The Oriental Mounts from Birka’s Garrison: An Expression of Warrior Rank and Status, Stockholm.
Hrubý, Vilém (1955). Staré Město. Velkomoravské pohřebiště „Na Valách“. Monumenta Archaeologica III, Praha.
Muraševa 2000 = Мурашева, В. В. (2000). Древнерусские ременные наборные украшения (Х-XIII вв.), Москва.
Muraševa, V. V. (2006). Kompositgürtel altrussischer Krieger aus dem 10. und dem Beginn des 11. Jahrhunderts. In: Eurasia Antiqua 12, Mainz, 353-368.
Müller-Wille, Michael (1976). Das Bootkammergrab von Haithabu. Berichte über die Ausgrabungen in Haithabu 8, Neumünster.
Paterson, C. – Parsons, A. J. – Newman, R. M. – Johnson, Nick – Howard-Davis, Ch. (2014). Shadows in the sand : excavation of a Viking-age cemetery at Cumwhitton, Cumbria, Lancaster.
Pletněva 1981 = Плетнева, С. А. (1981). Степи Евразии в эпоху средневековья, Москва.
Schietzel, Kurt (2014). Spurensuche Haithabu, Neumünster – Hamburg.
Thunmark-Nylén, Lena (1998). Die Wikingerzeit Gotlands II : Typentafeln, Stockholm.
Ungerman, Šimon (2019). Die Wadenriemengarnituren im frühmittelalterlichen Mähren. In: Poláček, Lumír – Kouřil, Pavel (eds.). Internationale Tagungen in Mikulčice IX. Bewaffnung und Reiterausrüstung des 8. bis 10. Jahrhunderts in Mitteleuropa, Brno, 307-341.